04.02.2016 | Río Grande | TALLERES CULTURALES
Los “Talleristas” de Gobierno serán contratados por fuera del sistema estatal
La Resolución Nº 04/16 de la Secretaría de Cultura de Tierra del Fuego crea el “Régimen de Talleres Culturales”. Se establece que los “Talleristas” deberán estar inscriptos en un “Registro de Talleristas”. La normativa no refiere “relación laboral” con el Estado. Los postulantes no deberán poseer cargos, horas cátedras, ni ninguna otra relación de dependencia con organismos públicos. Deberán presentar Libre Deuda de AFIP y de la Agencia de Recaudación Fueguina (AREF).
Los seis meses de transición no le alcanzaron al Gobierno de Rosana Bertone para delinear las acciones tendientes a llevar a la práctica la desarticulación de los Talleres Culturales y la creación de la nueva estructura mediante la cual se regirán esos espacios. Sin embargo, nada les importó el futuro de las familias que hasta el 31 de diciembre de 2015 percibían una retribución del Estado para desarrollar esas actividades y fueron dados de baja a partir del 1º de enero sin que se les pudiera dar una certeza sobre su futuro laboral.
El Gobierno de Rosana Bertone necesitó un mes y medio más para ratificar lo que la gran mayoría suponía que iba a suceder: que los “talleristas” no pertenecieran a las estructuras de empleados púbicos provinciales.
Hugo Alberto Santos, dirigente gremial, actual Secretario de Derechos Humanos de la CTA de los Trabajadores de Tierra del Fuego, fue el encargado de “ejecutar” la acción para concretar la definitiva desvinculación de los “talleristas” del ámbito estatal.
Santos, Secretario de Cultura de la provincia de Tierra del Fuego, se jacta de “iniciar una nueva etapa” al firmar la Resolución Nº 04/16 de la mencionada Secretaría que crea el “Régimen de Talleres Culturales”, que entre otros aspectos establece la creación del “Registro de Talleristas”, que no solo obliga a los trabajadores a estar incorporados en ese Registro, sino que también los obliga a presentar Libre Deuda de AFIP y de la Agencia de Recaudación Fueguina (AREF), y les exige no poseer cargos, horas cátedras, ni ningún otra relación de dependencia con organismos públicos. El mencionado “Régimen” establece que la Dirección Provincial del Acción Cultural será la responsable de la “contratación de los talleristas”; pero nada dice sobre cuál será la relación laboral del trabajador que brindará los talleres.
Pero evidentemente la decisión política es que esos trabajadores no pertenezcan a las estructuras de empleados públicos planta permanente del Estado provincial.
El solo hecho de exigirles Libre Deuda de AFIP y AREF (ex Rentas), ubica a los “talleristas” en posición de “contribuyentes del Estado”; es decir, deberán registrar un actividad privada tanto en AREF como en AFIP, con lo cual deberán pagar Ingresos Brutos, estar en el Registro de Proveedores del Estado -ProTDF- (aunque la Resolución Nº 04/16 no lo establezca), presentar Declaraciones Juradas ante la AFIP, etc.
Todo lo descripto anteriormente y decir: “no queremos que los talleristas pertenezcan a Gobierno”, era lo mismo.
Los “Talleristas”, aquellos que siempre trabajaron por la Cultura, aquellos que anhelaron después de muchos años ser empleados planta permanente del Estado provincial, hoy ven caerse a pedazos esas ilusiones. De un día para el otro se quedaron sin ingresos para sustentar sus familias. Santos dice “se inicia una nueva etapa”; y en esta nueva etapa, Santos, y el Gobierno del Frente para la Victoria en la figura de la Dra. Rosana Bertone, despreciaron el trabajo, el esfuerzo, el derecho, la historia, de un grupo de trabajadores que hasta presentaron proyectos propios a la Legislatura de Tierra del Fuego para buscar un encuadre justo a la actividad que desarrollan. El propio Legislador Juan Carlos Arcando el año pasado, hoy Vicegobernador de Tierra del Fuego, coincidió con la iniciativa legislativa de los “Talleristas”.
Lo cierto es que el Gobierno de Rosana Bertone ha decidido que los “Talleristas” no pertenezcan al Gobierno, que los Talleres Culturales no sean dependientes directos del Estado provincial; con lo cual se sale de un modelo de precariedad laboral para ingresar a otro modelo de precariedad laboral.
Por eso, quizás, sigo pensando que los títulos de dos notas publicadas en este medio periodístico no fueron equivocados: “Nada cambia en Tierra del Fuego, esto es más de lo mismo…”; y “Los rostros de la mentira y la traición”.
Más de lo mismo, más mentira, más traición…Más trabajadores “ajustados”, más precariedad laboral…Más poder político cercenando derechos de trabajadores…Y todavía no llevan dos meses de gestión!
Daniel Garay
Fuente: gremialesdelsur.com.ar