14.08.2020 | Ushuaia | TRABAJADORES PORTUARIOS
Protesta de estibadores en el Puerto de Ushuaia
La aprobación del regreso a la actividad por parte de SENASA, genera preocupación en los trabajadores que fueron convocados desde la empresa Logística Lech-Mar para bajar toneladas de merluza negra que está en el buque pesquero Echizen Marú. Este es el buque donde la gran mayoría de su tripulación estuvo infectada, se recuperó, y ya no está en Tierra del Fuego. Los trabajadores piden seguridad y garantías para no terminar infectados de coronavirus.
Desde las seis de la mañana los estibadores de Ushuaia se manifiestan la entrada del puerto para exigir que se presenten en el lugar autoridades gubernamentales, empresariales y sindicales, con el fin de pedir garantías y el aislamiento de los 180 trabajadores que fueron convocados de forma urgente para bajar unas 300 toneladas de congelados del barco pesquero Echizen Marú, el cual hace más de un mes ingresó a la ciudad con gran parte de la tripulación infectados de COVID-19, por lo que los portuarios temen por su salud y la de sus familias.
“Nosotros tocamos absolutamente todas las cajas y bolsas dentro de la bodega. Se hace a mano. Contacto estrecho con los bultos que fueron manipulados por todos los tripulantes infectados. El barco fue desinfectado, pero la carga viene estibada dentro de la bodega a temperaturas bajo cero. Se trata de merluza negra, que cuesta unos 35 dólares por kilo, es mucho dinero”, aseguró uno de los estibadores y agregó, “cuarenta filas de alto por 200 a lo largo, son miles de cajas, son 24 personas por turno en cada una de las dos bodegas que van a manipular mercadería no controlada y que luego circularán por la ciudad y regresarán a sus casas sin saber si están infectados. Fue muy rara la convocatoria para trabajar en el Echizen Marú, ya que a nosotros nos avisan tres días antes, cuando esta vez, los 180 fuimos notificados con menos de doce horas de antelación”.
Los trabajadores plantean que ellos pueden realizar el trabajo siempre y cuando se genere un protocolo que garantice el aislamiento de los 180 convocados por 14 días en un hotel o algún lugar adecuado para el total de estibadores, y todo eso pago por la empresa. Obviamente que el que quiera ir a trabajar tiene que saber que por 17 días aproximadamente no volverán a sus hogares.
Fuente: fmartika.com.ar