Con el comienzo del año, el Gobierno enfrenta el desafío de coordinar la puja entre los precios y los salarios de modo tal que los resultados sean consistentes con los objetivos de política macroeconómica. Sin embargo, este objetivo resulta particularmente difícil en momentos en que -si bien algunos gremios lograron ganarle a la inflación- en general el salario viene corriendo por detrás de los precios en los últimos años. Y, al mismo tiempo, buena parte del empresariado se queja por la vigencia de precios controlados que, argumentan, no reflejan la evolución de los costos.

Tampoco los gremios parecen muy dispuestos a acatar una pauta de incremento salarial en torno al 29/30% que habría sugerido el Gobierno.

Frente a la discusión de precios y salarios, “pareciera no haber todavía demasiada consistencia en la propuesta del Gobierno para contener la puja distributiva”, señala un informe de la Synopsis. Para la consultora, por ahora la iniciativa parece más una expresión de deseo y advierte que, “requerirá de una serie de acuerdos que no se ven fácil de lograr”.

CÓMO QUEDARON ALGUNOS SALARIOS REPECTO A LA INFLACION DE 2020

Camioneros 39% (+2.9%)

UTA 38% (+1.9%)

Bancarios 34% (-2.1%)

SMATA 33.4% (-1.7%)

Alimentación 32.5% (-3.6%)

Sanidad 32.5% (-3.6%)

UOCRA 29% (-7.1%)

Comercio 28% (-8.1% compensado c/ $15.000 en 3cuotas)

Ferroviarios 24.2% (-11.9% compensado c/ $30.000 en 6 cuotas)

UOM 17% (-19.1% compensado c/ $30.000 en 5 cuotas)

UPCN 17% (-19.1% compensado / bono de $4.000)

También analizaron los resultados obtenidos por los grandes gremios en las negociaciones a lo largo del año pasado respecto a la inflación. La conclusión es que, “los camioneros tuvieron la mejor paritaria del 2020, seguidos por la UTA, gremio que representa a los trabajadores del transporte automotor y de subterráneos”.

Los grandes sindicatos lograron resultados dispares cuando se comparan los aumentos obtenidos con la evolución del índice de precios. Los camioneros tuvieron la mejor paritaria, al conseguir cuatro aumentos a lo largo del año que sumados totalizan un aumento en torno de 39%. De esta manera, las remuneraciones nunca perdieron contra la evolución de los precios al analizar la evolución mes a mes.

Otros obtuvieron un empate. Es el caso de los bancarios que terminaron apenas por debajo de la inflación acumulada durante el año pasado (36,1%), al lograr un aumento cercano al 34%, en diferentes cuotas.

Pero también hay trabajadores cuyos ingresos quedaron sensiblemente retrasados. Entre ellos se destacan los estatales (UPCN), con apenas 17% de aumento en 2020 y un bono a fin de año. De esta forma, los empleados del sector público vieron recortados sus ingresos cerca de 14%.

Distintos trascendidos dan cuenta que el objetivo del Gobierno es utilizar el parámetro de inflación contemplado en el Presupuesto 2021 (29%) o a lo sumo 30% como una suerte de pauta oficial, para asegurar compromisos empresarios y sindicales que no se desvíen mucho de esa referencia. Pero “la falta de consistencia de ese pronóstico con los que está realizando el mercado (el último REM pronosticó una inflación para 2021 de 45%), le ponen un gran interrogante al acuerdo, que se ve más como una formalidad que como una posibilidad real de coordinar con éxito precios y salarios”, sostiene Synopsis.

Desde el sindicalismo se volvió a enarbolar la bandera de siempre frente a este tipo de propuestas de anclar expectativas de aumentos salariales: se puede firmar cualquier tipo de acuerdos que no le ponga un techo a las paritarias.

Así lo dijo Héctor Daer, uno de los dos Secretarios Generales de la CGT, al afirmar que los gremios rechazan la posibilidad de que se imponga algún tipo de "techo" para el debate salarial que viene, después de un 2020 en el que muchos sectores perdieron poder adquisitivo y puestos de trabajo.

Hasta el momento, no son muchas las precisiones acerca de cómo se alinearán “precios y salarios” como solicitó a fin de año la Vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner.

Synopsis apunta que, “a la falta de precisión sobre estos acuerdos, se le suma la particularidad de que los mismos no serán canalizados por el Consejo Económico y Social, que fuera lanzado de apuro a fines del año pasado bajo la conducción de Gustavo Béliz, y que pareciera ser el ámbito más adecuado para lograr acuerdos de este tipo”. En principio, se considera que desde el Ministerio de Economía se apuntó a “una metodología” que no se definirá en el marco del Consejo.

En tanto, mientras los sindicatos plantean que no se le ponga techo a la paritaria, desde el sector empresario reclaman la necesidad de que la base sobre la cual se parta para alinear precios y salarios incluya -lo antes posible- una recomposición de precios que estuvieron “pisados” durante el 2020.

El trabajo concluye señalando que, “lo cierto es que pareciera no haber todavía demasiada consistencia en la propuesta del Gobierno para contener la puja distributiva, que por ahora es más una expresión esperable de deseo de la conducción de la política económica, pero que requerirá de una serie de acuerdos que no se ven fácil de lograr”.

Sobre todo, enfatiza, en un contexto empresario delicado por las pérdidas que ocasionó la pandemia, y en un marco sindical también delicado por la puja que sobrevendrá si las elecciones de las nuevas autoridades de la CGT se llevan a cabo finalmente este año.

Fuente: ambito.com