01.05.2021 | Tierra del Fuego | DÍA DEL TRABAJADOR
“Hay poco para festejar y mucho para reflexionar”, Horacio Catena
El Secretario General de CTA Autónoma de Tierra del Fuego, reflexionó acerca del Día del Trabajador en un contexto mundial y en el marco de la pandemia. “Se perdió mano de obra formal y empieza una reconversión virulenta y fuerte a las horas de trabajo no convenidas llamadas la uberización del trabajo”, sostuvo Horacio Catena.
“Para los y las trabajadoras, en este 1 de mayo, hay poco para festejar y mucho para reflexionar, sobre todo poder mirarnos como una sola clase, no solo en nuestra provincia, no solo en nuestro país, sino en todo el mundo, para ver los efectos devastadores que ha tenido sobre la clase obrera, sobre los trabajadores y trabajadoras en el mundo los efectos de la llamada pandemia, que para muchos de nosotros y de nosotras no es nada más que la continuidad a gran escala de la guerra comercial por la disputa interimperialista que tiene como centro, no único, a Estados Unidos y China, con gran injerencia de los rusos, de la India, de las potencias europeas como Alemania y demás.
Pero hay algunos indicadores que, como mínimo, este primero de mayo los trabajadores y trabajadoras tenemos que empezar a prestarle atención.
Uno de los indicadores es que, a días de que se declare la pandemia mundial, el Estado chino se quedaba con los principales monopolios yanquis radicados en ese país por monedas, una movida pensada y diseñada y llevada adelante que le dio un golpe estratégico a uno de los imperialismos más feroces y más agresivos de la tierra.
Luego vienen otros indicadores, como es que al año de cumplirse la pandemia aquellos que entraron ricos a la pandemia, los indicadores dicen un 46% pero se podría decir casi un 50% más ricos de lo que eran previo a la pandemia.
Luego viene otro indicador que son los cientos de miles de horas de trabajo reglamentado, es decir convenido, que son los que se registran, los que se pueden computar, que se perdieron; es decir que, se perdió mano de obra formal y empieza una reconversión virulenta y fuerte a las horas de trabajo no convenidas llamadas la uberización del trabajo, o el trabajo en plataforma como los Pedido Ya, o el teletrabajo a distancia que son los más promocionados, pero esto cuando se ve en una escala industrial también es importante poder reflejarlo.
Luego tenemos que decir que avanzó el sistema de control a través del habeas data porque tenerte un año conectado a la gran parte de la tierra le ha dado a los pocos pulpos mundiales que son los que registran la habeas data la posibilidad de tener un conocimiento acabado de las necesidades de los gustos, los usos, las tendencias, para la creación de ese pensamiento algorítmico, que se ha utilizado tanto en la Argentina entre la izquierda y derecha, en Latinoamérica, A o B, blanco o negro, y eso entonces y obviamente eso borra el rol histórico de los trabajadores y trabadoras en los procesos de transformación, entonces yo me paro desde ese lugar y digo que todo lo que está volviendo vuelve peor.
Lo dije en muchos lugares, incluso en la Legislatura, que por el ejemplo el Ministro más liberal que tiene el Gobierno nacional, el Gobierno de Alberto Fernández, es el Ministro Trotta, quien fuera de la huésped del cavalismo, ha implementado un sistema de presencialidad que no tiene un solo elemento innovador, y lo terrible es que se replica en la provincia sin siquiera poder ser cuestionado y poder recurrir a las docentes y los docentes que les han puesto el hombro en este año de pandemia.
A mí me parece que un elemento importante a tener en cuenta, es que se ha profundizado la desigualdad, a pesar de que se ha demostrado el fracaso de lo que algunos llaman en el neoliberalismo, un fracaso furibundo porque hoy los que no tienen un sistema público de salud fuerte la están pasando peor que en cualquier otro lado.
Otro de los temas es la no liberación de las patentes con las vacunas, es decir que eso es un claro negocio de la pandemia, porque si la pandemia es una cuestión de vida o muerte, claramente se hubiera podido poner, si hubiera estado el sistema dirigido por los trabajadores y trabajadoras que pongan a la vida como centro, no podrían existir restricciones de patentes porque está por delante del negocio la vida, y ese es un elemento que marca claramente la intencionalidad de la pandemia, la imposición del capitalismo de plataforma, y por otro lado, hacia donde llevan el desemboque a lo que ellos llaman la nueva normalidad, y yo le llamo la vieja normalidad.
Y en ese punto los trabajadores y trabajadoras, como ha sido siempre, tenemos que ocupar el centro del ring, o sea, no podemos pedirles a otras clases sociales que hagan lo que tenemos que hacer nosotros, tendremos que sacudir el polvo de todo lo que nos ha caído encima, poder discutir los caminos, transitarlos, y ahí poder ir a un camino emancipador, a un camino donde las desigualdades no sean las reglas, donde los trabajadores y las trabajadoras tengan los beneficios de sus trabajos, donde la salud, la educación, el techo, el habitad, la ecología, los recursos naturales, y nuestras vidas, valgan más que las variables económicas y a eso nosotros nos animamos.
Nosotros venimos diciendo que es tiempo de recuperar derechos y ahora le agregamos algunas otras cosas que como decimos que ese gran día va a llegar cuando lo vayamos a buscar; no hay que quedarse parado esperando, sino que hay que ir a buscar ese gran día para que las cosas sucedan, hay que hacerlas suceder sobre las bases de un sueño colectivo, de objetivos colectivos y objetivos transformadores”.
Fuente: gremialesdelsur.com.ar