22.08.2024 | Nacionales | DOCENTES
“La educación como servicio anula el ejercicio pleno de un derecho”, Gabriel Brener
El pasado 15 de agosto, la Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción al proyecto de ley que declara la educación como un “servicio estratégico esencial”. A la espera del tratamiento en el Senado de la Nación, “Tripulantes de la Mañana” conversó con Gabriel Brener, Docente e Investigador especialista en educación.
“Lo esencial es invisible a los ojos del actual gobierno” afirmó Brener, resaltando que al declarar la esencialidad de la educación se busca una herramienta para disciplinar a la docencia argentina.
“Considerando a la educación esencial se la mimetiza o iguala con la idea de un servicio y se le quita, anula u omite la condición de derecho que tiene la educación. En ese sentido, al deslizar semánticamente esta idea que esencial es lo importante y no explicar que la educación como servicio anula el ejercicio pleno de un derecho, entonces lo que hace en primer término es minimizar o empobrecer el derecho fundamental de los pibes y las pibas a ser parte de la educación y las escuelas en Argentina, pero especialmente lo que intenta es disciplinar o anular un derecho de la docencia a reclamar condiciones dignas para el ejercicio de su profesión”, explicó.
Brener planteó la educación como un derecho social, conquistado por enormes luchas y miles de anónimas/os que “dejaron su vida, la tiza, la palabra, el patio y el recreo para que la educación no fuese un privilegio y se transformara en un derecho”.
En este contexto social, económico y político tan complejo, Brener plantea que, “es necesario pensar en calidad e inclusión de manera conjunta, ya que de lo contrario se incorpora la idea de mercado vinculado a calidad. En ese sentido, consideró que, “es imposible pensar en calidad si no es con todos los chicos en la escuela, generar políticas de Estado más activas, no reducir el Estado a lo mínimo”.
“La calidad de la educación no es solamente medir o mensurar las habilidades cognitivas en aritmética o en comprensión lectora, también es poder evaluar cómo le enseñamos a los chicos a cuidarse a sí mismos, a cuidar a las compañeras y compañeros, como trabajos en la escuela el embarazo a temprana edad de modo tal que los chicos puedan ser más conscientes en torno a su propia sexualidad desde la perspectiva de conocimientos validados científicamente”, sostuvo y agregó, “la calidad educativa no debe responder a una lógica de mercado, sino estaría respondiendo “menos a un derecho y más a un privilegio”.
Brener planteó que es necesario generar las condiciones para que el estudiantado pueda transitar las escuelas, acceder a bienes culturales y tener la posibilidad de estudiar en niveles superiores o universitarios. “Tenemos que poder encontrar la posibilidad de que el otro no solamente esté, sino de que sienta parte para que se apropie de lo que tenemos para ofrecerle”, sostuvo.
“La pedagogía de la crueldad se presenta como una alternativa cuando consideramos al otro un objeto” afirmó, planteando que es necesario seguir disputando sentido con las palabras “porque la crueldad también es la antesala de las peores consecuencias de la vida social, la crueldad cuando los otros son cosas los convierten en descartables. Si el otro es descartable, lo que rige es la competencia, la más absoluta ley de la selva y la supervivencia del más fuerte”.
Para Brener es fundamental una educación democrática “con el imperativo de la solidaridad” para no ver al otro como una cosa, como algo descartable, como instala la lógica que tiene que ver con la crueldad.
“Estoy convencido de que las mejores escuelas son las que constituyen verdaderamente un trabajo cooperativo y creo definitivamente que el mejor destino de las escuelas es la construcción de comunidad con la comunidad justamente de la que forma parte porque la vocación del ajuste perpetuo y la lógica depredadora del mercado tiende a que cada uno se concentre en sí mismo”.
«Es contracultural, pero muy necesario pensar el encuentro con los otros; en la palabra mediando o anteponiéndose a la reacción violenta; en la posibilidad de la escucha. La escucha es fundamental en estos tiempos en lo que nos devora la lógica depredadora de las redes, la agresión en las redes y en los medios de comunicación, donde se niega al otro como tal», concluyó.
Fuente: fmnuestrasvoces.com.ar