El gremio comenzó a formarse en el ámbito de la CTA Capital en el año 2001. El reclamo por que se respete la jornada laboral de 8 horas, condiciones y salarios dignos son los pilares de su lucha.

En ese sentido, en el Sindicato denunció a varias empresas ante en el Ministerio de Trabajo y consiguió así que en junio de 2010 saliera la resolución 26.527 para que a todos aquellos que realicen trabajos de vigilancia, se les respete la jornada de trabajo de 8 horas, y de 7 horas en caso del turno noche. Aunque actualmente sean muy pocas las empresas que cumplen esta resolución y que la mayoría trabaje un promedio de 12 a 16 horas diarias, fue una iniciativa que poco a poco está dando sus frutos.

Otro de los asuntos a resolver para mejorar el ambiente laboral tiene que ver con las condiciones laborales: muchos de los vigiladores trabajan en condiciones precarias, a la intemperie, algunos sin acceso a un baño, otros, sin la posibilidad de tomar asiento y muchos de ellos con tan sólo media hora de descanso. Además, muchas veces son obligados a cumplir cumplen otras actividades como tareas administrativas en las recepciones, o la de juntar changuitos en los supermercados, sin que ello se vea reflejado en sus salarios.

Se estima que en la Argentina hay unas 300 empresas de seguridad privada, donde trabajan unos 300.000 vigiladores. Actualmente, el Sindicato de Trabajadores de Vigilancia Privada cuenta con unos 800 afiliados. La dirigencia está encabezada desde 2009 por Liliana Villareal como secretaria general y Walter Rodríguez como secretario gremial. Esperan convocar a sus primeras elecciones el próximo 24 de marzo, las que se realizarán en Capital Federal y provincia de Buenos Aires, en donde se concentran sus afiliados.

 

Fuente: cta.org.ar