30.10.2012 | Nacionales | PARO NACIONAL
Moyano resolvió ir al paro con Micheli
La CGT y la CTA opositoras avanzan en la convocatoria a una huelga nacional, que sería el 20 de noviembre; se suman Sobrero y Buzzi, e invitarán a las centrales de Barrionuevo y Caló.
La decisión está tomada: habrá paro. Se evitaría sólo si hay un giro del Gobierno o ante un eventual anuncio oficial sobre una suba del umbral del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, algo que hoy parece improbable.
Moyano mantendrá próximamente una serie de encuentros para definir detalles sobre la jornada de lucha. Una de las reuniones será con Rubén "Pollo" Sobrero, opositor a José Pedraza en la Unión Ferroviaria. El acuerdo entre ellos está cantado: paralizarán los servicios de la línea Sarmiento el día de la protesta.
Moyano apelará a la retórica para intentar sumar nuevos aliados al paro. "Unidos en la acción" será el eslogan que comenzará a circular hoy desde la CGT con sede en Azopardo. Así, el camionero pretende lograr la participación de sindicatos que no comulgan con su liderazgo.
Según contaron dos jerárquicos de la CGT moyanista, ya se abrió un canal de diálogo con dirigentes cercanos a Luis Barrionuevo. Además, no descarta conversar con la central que encabeza Antonio Caló, que está alineada con la Casa Rosada. Gerardo Martínez y Alberto Roberti podrían ser los interlocutores de este sector.
Hasta el momento, la convocatoria a la huelga tiene garantizada la participación de los estatales de ATE, que impacta directamente en 700 municipios y en hospitales públicos; de todas las ramas de los camioneros que responden a Moyano; de un puñado de gremios portuarios, y de los ferroviarios del Sarmiento.
Además, asistirán a la movilización a la Plaza de Mayo, la Federación Agraria de Eduardo Buzzi, la Corriente Clasista Combativa (CCC), la agrupación Barrios de Pie y la Federación Universitaria de Buenos Aires.
Las centrales opositoras unirán sus reclamos para exigir la universalización de las asignaciones familiares; elevar el mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, y pedir "un aumento de emergencia" para los jubilados.
También habrá un fuerte pedido por los fondos de las obras sociales sindicales. A esta demanda apuesta Moyano para sumar a Barrionuevo y a algún gremio díscolo de la CGT de Caló. La negociación está abierta, aunque parezca un deseo imposible.
Fuente: lanacion.com.ar