Sindicatos de trabajadores estatales, organizaciones sociales y partidos políticos marcharán hoy a las 11 a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires en repudio de la represión en el Hospital Borda y la criminalización de la protesta social. 

“La derecha quiere cambiar el modelo de país y para eso necesita un Estado represivo”, dijo ayer el diputado kirchnerista Edgardo Depetri, quien consideró que la “violencia física y verbal” en el 18A, la postura del arco opositor en diputados en el debate de la reforma judicial y la represión en el Borda “forman parte de una estrategia para que el conflicto se dirima por la violencia”. 

En ese sentido, el presidente del bloque de legisladores porteños del FpV, Juan Cabandié, afirmó que “cuando se acude a la represión es porque se acaba la política”. Y aseguró que “el mejor ejemplo de no reprimir la protesta social son Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner”. 

El ministro de Seguridad de la ciudad, Guillermo Montenegro, reconoció que lo ocurrido el viernes “tiene que ver con la discusión sobre qué país queremos”. “Si queremos un país donde está bien agredir a la policía, no respetar la autoridad y la ley, estos se vuelve una discusión política y de valores, no de partidos políticos sino del modelo de país que queremos”, dijo el responsable de la Policía Metropolitana. 

La jornada de protesta incluirá un paro de 24 horas en el caso de los estatales de ATE y de 48 horas, para los profesionales bonaerenses afiliados a CICOP y los empleados de los talleres protegidos y los hospitales José Borda, Tobar García y Braulio Moyano, bajo la órbita de la seccional porteña de UPCN. 

En tanto que trabajadores del subte liberarán los molinetes para facilitar el traslado de los manifestantes a la marcha, según anunció la Asociación Sindical de Trabajadores del Subte y el Premetro. 

Por su parte, el secretario General de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), Eduardo López, indicó que marcharán a la Jefatura de Gobierno, pero van “a mantener abiertas las escuelas porque para cerrar escuelas y hospitales lo tenemos al jefe de gobierno porteño”. 

En ese sentido, el secretario General de la CTA, Hugo Yasky, señaló que la represión no fue “un exceso” sino “la decisión del jefe de gobierno porteño y de quienes lo secundan de arrasar con los derechos de la ciudadanía y reprimir”.”Lo que sucedió el viernes es absolutamente ilegal”, acotó el secretario general de la Junta Interna de Talleres Protegidos del Hospital Borda, Marcelo Frondizi. 

“La agresión sufrida de parte de la Policía Metropolitana, que provocó medio centenar de heridos, no puede quedar impune”, manifestaron los líderes de Camioneros, Hugo Moyano, y Canillitas, Omar Plaini, en un comunicado. 

Y el secretario general de ATE Capital, José Luis Matassa, afirmó: “Responsabilizamos a Mauricio Macri como jefe de gobierno porteño de la brutal represión del viernes pasado y exigimos la renuncia del ministro de Seguridad, Guillermo Montenegro”. 

En tanto, el legislador porteño Francisco “Tito” Nenna aseguró ayer que tiene fotos que muestran a efectivos de la Policía Metropolitana con balas de plomo durante la represión y adelantó que las presentará ante la Justicia. “Vamos a ir por una acción penal contra Mauricio Macri por heridas a los pacientes del hospital Borda”, afirmó el sindicalista docente.

Asimismo, su par del MST, Alejando Bodart, denunció ayer penalmente al jefe de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, por lesiones. “Tengo la filmación donde se ve que me apuntan y me disparan, y una bala, no sé de qué, me pasa cerca de la cabeza”, dijo Bodart a la prensa. 

En el mismo sentido, el fotógrafo de Clarín José “Pepe” Mateos explicó que lo agredieron los policías de la Metropolitana porque quiso “hacer la foto de cuando estaban demoliendo el edificio”. 

A la marcha de hoy también convocó el Movimiento Evita Capital, que en un comunicado firmado por su secretario general porteño, Jorge Taiana, expresó que “no es nuevo que ante el conflicto social el PRO recurra al único diálogo que conoce: el sonido de las balas y de la represión”.