28.09.2025 | Regionales | BUENOS AIRES - TRABAJADORES DE LA ALIMENTACIÓN
Tía Maruca cerró su fábrica en Chascomús y echó a todos los trabajadores
Casi 30 familias quedaron en la calle tras el cierre repentino de la histórica planta. El Ministerio de Trabajo bonaerense interviene en el conflicto mientras los empleados reclaman compensaciones y denuncian el vaciamiento de la fábrica.
En el este de la provincia de Buenos Aires, decenas de familias se quedaron sin ingresos por una decisión que cayó como un mazazo. Esta semana, la histórica planta de Tía Maruca en Chascomús cerró sus puertas y echó a todo su personal sin aviso previo. La medida afectó a 27 trabajadores, que de un día para otro, perdieron su fuente de ingresos en un contexto de inflación y recesión que castiga con dureza al empleo formal.
La fábrica llevaba más de dos décadas produciendo galletitas y productos artesanales.
Reclamo por indemnizaciones y denuncia de vaciamiento
Los trabajadores despedidos, entre ellos la propia Jefa de Planta, comenzaron a negociar una compensación económica que les permita sostener a sus hogares hasta conseguir un nuevo empleo. Sin embargo, el panorama es complejo: la compañía argumenta que los empleados no fueron “despedidos” sino “cesanteados”, lo que abre la puerta a un conflicto legal por la cobertura de indemnizaciones y derechos adquiridos, ya que la firma habla de “compensación económica”.
En ese marco, los ex empleados exigieron que se detenga de inmediato el vaciamiento de la fábrica, ya que la empresa está retirando con rapidez la materia prima y los insumos restantes, lo que podría dificultar cualquier instancia de negociación.
La intervención del Ministerio de Trabajo bonaerense
El viernes se realizó una primera audiencia entre las partes, con la mediación del Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires. La reunión había sido convocada originalmente para abordar un retraso en el pago del aguinaldo, pero la abrupta decisión de la empresa obligó a cambiar el eje de la discusión hacia la cesantía masiva. Las autoridades provinciales intervinieron para garantizar un marco de negociación, aunque por el momento no hubo definiciones concretas sobre el futuro de los trabajadores ni sobre la continuidad de la planta.
Una crisis que se repite
No es la primera vez que Tía Maruca atraviesa una situación de este tipo. En agosto de este mismo año, la empresa ya había paralizado una fábrica en San Juan alegando dificultades económicas. El cierre en Chascomús confirma que la firma viene reduciendo su estructura productiva en medio de la crisis nacional, dejando a su paso trabajadores en la calle y comunidades enteras afectadas por la pérdida de empleo.
Fuente: datagremial.com