Por primera vez desde que el INDEC comenz� a publicar en 2003 la estad�stica de Distribuci�n del Ingreso promedio de la econom�a abierta por sexo, los varones perdieron la supremac�a en la comparaci�n por hora trabajada en la ocupaci�n principal de cada hogar.

El Instituto de Estudios Laborales y Sociales de la UCES detect� que ese retroceso no redund� en un incentivo para que la franja femenina, que es mayor�a, se volcara m�s activamente al mercado laboral. La pol�tica social del Gobierno habr�a contribuido decisivamente en esos cambios.

"En valores absolutos, la informaci�n del INDEC indica que en los �ltimos ocho a�os la remuneraci�n promedio de la franja femenina se ubic� en un rango de 70 a 75% de la estimada para los hombres, con un piso de 66,7% en el primer trimestre de 2005 y un r�cord de 80% alcanzado como nivel medio entre enero y marzo de 2011".

Sin embargo, observa el trabajo que, "ese gap, m�s que originarse en actos de discriminaci�n de los empleadores o a predominios de unos en las ocupaciones con mayor retribuci�n y de otras en las menos calificadas, se explica fundamentalmente por la amplia diferencia en la cantidad de horas promedio semanal de labor que cada g�nero le asigna habitualmente a las tareas remuneradas".

Al dividir los ingresos promedio de las ocupaciones principales que surgen de la Encuesta Permanente de Hogares por el tiempo dedicado a generarlo, el trabajo de Idelas-UCES comprob� que, "la brecha promedio a favor de los varones fue hist�ricamente inferior a cinco puntos porcentuales al de las mujeres, con las excepciones de 2004 y 2005, cuando se aproxim� a 10% y ahora que se torn� a favor del sexo opuesto en casi tres puntos porcentuales".

Ya en 2008 se hab�a insinuado una acelerada aproximaci�n del salario promedio horario de las mujeres al que recib�an los hombres, pero no pudo sostenerse en 2010. De ah� que tuvieron que esperar un a�o m�s para demostrar que ese quiebre fue circunstancial y que la carrera en busca del liderazgo segu�a a toda marcha.

"Los datos de Distribuci�n del Ingreso del INDEC revelaron que esa reacci�n se sustent� en el salto de la remuneraci�n promedio del g�nero femenino en 33,3%, frente a 25% del masculino, dado que en los �ltimos doce meses no se verificaron cambios en las horas trabajadas por cada sexo, con un promedio de 35 semanales en el primer caso y 45 en el segundo", explica la casa de altos estudios.

Impacto negativo sobre la oferta laboral

El an�lisis del Idelas-UCES, pudo detectar que ese giro no alent� el crecimiento de la oferta laboral de mujeres, pese a la notable tonificaci�n que mantuvo la actividad de los sectores productores de bienes y servicios, levemente interrumpida por los efectos de la crisis financiera internacional en 2009.

Por el contrario, "los datos de la EPH mostraron que en los �ltimos doce meses la poblaci�n econ�micamente activa femenina se achic� a 46,5% del total del segmento comprendido entre los 14 y 65 a�os, constituy�ndose en la menor proporci�n desde 2003 y marc� una baja de casi dos puntos porcentuales desde 2009", agrega el informe de agosto de la entidad.

Ese desempe�o contrast� con la din�mica que mostr� el segmento de los varones, al punto que la brecha entre la PEA femenina y la masculina, lejos de achicarse, se ampli� a 35,8 puntos porcentuales, desde 33,6 en los dos a�os precedentes.