07.08.2011 | Regionales |
COMODORO RIVADAVIA: Al menos 16 mil trabajadores no tienen acceso a obra social ni jubilación
Así se desprende de la Encuesta Permanente de Hogares. Además del empleo informal persisten las prácticas de precarización laboral. Las áreas sociales del Estado tiene la mayor cantidad de trabajadores precarizados. En el Valle, donde el empleo público es mayoría, hay más trabajadores que no aportan al sistema jubilatorio que en Comodoro Rivadavia.
El 16% de la población económicamente activa de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly trabaja sin tener descuentos jubilatorios.
En la década de los 90 proliferaron los contratos basura, la tercerización y la precarización laboral. El escenario no ha cambiado en ciertos sectores de la actividad privada como el campo y hasta en el Estado donde se practican sistemas de contratación perjudiciales, en especial para los jóvenes. Esa es la herencia neoliberal.
Según la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), el 16% de la población económicamente activa de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly trabaja sin tener descuentos jubilatorios. En el conglomerado Rawson-Trelew el porcentaje es mayor, asciende al 28,6%.
Hay sectores privados en donde la informalidad es más frecuente. En enero último, Alberto Barras, secretario nacional de prensa en representación de la zona patagónica de UATRE (Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores) confió que se estima que un 20% de los trabajadores rurales del Chubut no han sido blanqueados por sus patrones. Mientras, entre los cuentapropistas, la falta de aportes es un problema, en especial quienes se dedican a la construcción.
FUERA DEL SISTEMA
La Encuesta Permanente de Hogares (EPH) arroja que el 16% de la población en actividad de Comodoro Rivadavia y Rada Tilly se trata de asalariados sin descuento jubilatorio. A nivel nacional, el indicador se elevó con el boom de los planes sociales como el de Jefes y Jefas de Hogar, similares a Trabajar para Incluir y otros programas de Chubut.
Si se toma de la Encuesta Permanente de Hogares la población total de Comodoro Rivadavia-Rada Tilly que tiene entre 20 y 59 años y se la cruza con la surgida del Censo 2010 en el departamento Escalante (serían 100.800 trabajadores activos), la conclusión es que al menos 16 mil los trabajadores en esa condición de precariedad.
El número aumenta en el conglomerado Rawson-Trelew. Con el mismo método de entrecruzamiento se llega a la existencia de 68 mil trabajadores en actividad, de los cuales 19.500 no realizan aporte alguno al sistema jubilatorio. Así, pese a tener menos habitantes que Comodoro Rivadavia y Rada Tilly, la población precarizada es mayor en el valle.
ASISTENCIA SOCIAL PRECARIZADA
En el Estado, la situación afecta particularmente a todas las áreas relacionadas con lo social. Un caso concreto son los estudiantes de Trabajo Social contratados en el programa Trabajar para Incluir, que impulsaba Provincia y al que los municipios pueden adherir. Así fue en Comodoro Rivadavia, pero la desventajosa relación laboral (deben inscribirse como monotributistas) los hizo movilizarse.
La cláusula octava del Convenio Trabajar para Incluir (modificada en 2007) dice que los acompañantes comunitarios --tal es la denominación de quienes trabajan en ese programa-- “recibirán $1.200 por todo concepto, debiendo efectuar en forma personal los aportes correspondientes a su condición exhibida ante la AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos)”.
Luján Gutiérrez, secretaria de Derechos Humanos por la CTA (Central de Trabajadores Argentinos) en Comodoro Rivadavia, apuntó en diálogo con Diario Patagónico sobre estas prácticas: “si bien nacen en los 90 con el neoliberalismo, se siguen aplicando. En nuestra provincia, no ha cambiado y se sienten muchísimo en el área social, porque todo el personal que trabaja en terreno está precarizado, profesionales y no”.
DISTINTAS FORMAS
La precarización en el ámbito estatal incluye los Planes de Empleo, las becas y la Planta Transitoria. En este último caso, el gobierno provincial de Mario Das Neves ha pasado becados y contratados a Planta Transitoria: en noviembre de 2008 se pasaron 1.868 agentes contratados a ese régimen de relación laboral.
La Planta Transitoria provocó quejas de los diferentes gremios estatales, entre ellos ATSA (Asociación de Trabajadores de la Sanidad). Sara Barrera, en diciembre de 2009, advertía de las renuncias de enfermeros ya que los contratos no les satisfacían porque los salarios no se relacionaban con el tipo de trabajo que realizaban.
Las becas también se expanden en los programas de asistencia social del Estado. Siempre con la misma lógica de fondo: pagar poco, hacer la menor cantidad de contribuciones a la AFIP y poder deshacerse del personal en cualquier momento y sin causa justificada. Otro dato es que los precarizados no acceden a bonos especiales ni aumentos salariales, por lo que están desprotegidos.
Fuente: elpatagonico.net